lunes, 29 de diciembre de 2014

Reto económico: Sana economía familiar.

Llegar a fin de mes se ha convertido para muchas personas en todo un reto económico, y ahorrar, en un deseo difícil de cumplir. Tener claros los ingresos y los gastos es clave para mantener la economía familiar.

En las familias ocurre como en el Estado: cuando los gastos exceden a los ingresos se produce un déficit presupuestario que lleva, inevitablemente, a la adopción de dos tipos de medidas. Una, reducir gastos, y la otra, solicitar un préstamo. La eliminación de gastos superfluos es siempre recomendable, y si no ha sido suficiente con esos recortes el último recurso es pedir prestado, algo que puede ofrecer un alivio instantáneo pero también puede volverse en contra a la hora de afrontar la devolución de lo prestado.



Llegados a tal circunstancia resulta difícil resolver el problema, aunque sí es posible tomar ciertas decisiones que traten de evitar ese desenlace. Todas ellas pasan, inevitablemente, por llevar un control más exhaustivo de los gastos y los ingresos de la economía familiar. Sólo una visión de conjunto de los recibos que tenemos que pagar y del dinero total que percibimos nos permitirá saber si nuestra economía está saneada o se precipitará al vacío en el momento en que nos encontremos con un gasto imprevisto.

Muchas veces el apuro económico nos hace tomar no tan buenas decisiones, he aquí algunas recomendaciones, para la gestión de su economía doméstica.

1. Las prisas no son buenas consejeras. Evidentemente, si estamos pensando en recurrir a un crédito rápido es porque tenemos una necesidad de dinero, pero debemos tomarnos nuestro tiempo. Si actuamos con prisa, es muy probable que no tomemos las decisiones correctas.

2. No dejarse llevar por la publicidad. Nos bombardean por todas partes con ofertas de dinero rápido y fácil: en el buzón, en la TV, a través de un SMS en el móvil, por internet... Son ofertas que pueden parecer irresistibles, acceso fácil y con pocos trámites a una cantidad de dinero que necesitamos de manera urgente. Suelen incidir en las ventajas, pero esconden o camuflan las desventajas.

3. Es primordial buscar distintas alternativas y estudiar bien sus condiciones. Cuestiones importantes a comparar son: el tipo de interés que nos ofrecen, las comisiones que nos van a cobrar y las condiciones y demás garantías asociadas que lleva el préstamo. Aconsejable es buscar más de 3 o 4 ofertas y elaborar una tabla comparativa. Sólo así nos garantizamos tomar la mejor decisión.

4. Es recomendable calcular siempre la cantidad final que vamos a pagar. Muchas veces nos fijamos sólo en el importe del préstamo y las cuotas mensuales, pero no nos paramos a pensar cuánto dinero acabaremos pagando al final de la operación. Si lo hiciéramos, nos daríamos cuenta del pozo tan profundo y oscuro que implican estos créditos rápidos.

5. Elaborar un presupuesto familiar. Pues tendremos una herramienta muy útil para planificar nuestros gastos, anticiparnos a las necesidades extraordinarias de capital y estudiar cómo hacerles frente. Lo mejor es hacer este presupuesto por escrito, la herramienta es lo de menos (podemos usar una plantilla de Excel, una aplicación informática o papel y lápiz). La clave es mantener un equilibrio entre cobros y pagos que nos permita ahorrar mes a mes y no volver a incurrir en mayores necesidades de financiación.


Si llevamos a cabo estos consejos, será más sencillo lograr una economía familiar sana y equilibrada. El beneficio principal es que todos los miembros aprenderán cómo organizarse de manera individual para contribuir de forma colectiva. La planeación evita la posibilidad de hacer gastos espontáneos o enfrentar imprevistos sin afectar las finanzas de la familia.

martes, 16 de diciembre de 2014

Trabajo y estrés ¿cuánto pierden las empresas?

En la actualidad el estrés laboral se presenta como uno de los principales problemas para la salud de los trabajadores y el desempeño de los mismos en las organizaciones. Un trabajador bajo estrés suele estar desmotivado, poco productivo y la empresa para la que trabaja tiene las peores perspectivas en cuanto a éxito se refiere en un mercado competitivo.



Recordemos que el estrés ha sido reconocido por la Organización Mundial de la Salud, como la enfermedad del siglo XXI. Una buena gestión y adecuada organización del trabajo son la mejor forma de prevenir el estrés. Si un empleado sufre de estrés, su jefe debe ser consciente  del problema y saber ayudarlo.

El estrés laboral es la reacción que tiene una persona ante exigencias y presiones laborales que no se ajustan a sus conocimientos y capacidades y que colocan a prueba su capacidad para asumir la situación.

Pero sabe ¿cuánto puede perder una empresa por este mal en sus trabajadores?
Según especialistas las pérdidas para las empresas son de US$ 2,800 por cada trabajador al año, lo que ha podido ser confirmado en diversos estudios realizados en varias partes del mundo.

Sin embargo, en esa cifra no se considera lo que deja de ganar la empresa como consecuencia de todo ello y cuyo impacto va a depender –según Facci- de cada compañía y de su nivel de rentabilidad.

Causas del estrés laboral

Una de las principales causas en la mala organización en la entidad, es decir,  el sistema de trabajo, el modo en que se definen los puestos y forma de gestionarlo, pueden provocar estrés laboral.

El exceso de exigencias y presiones o la dificultad para enfrentarlas pueden tener origen en una mala gestión del trabajo o condiciones laborales insatisfactorias. Estas circunstancias pueden hacer que no reciba el apoyo suficiente de los demás o no tenga suficiente control sobre su actividad y las presiones que conlleva.

Efectos del estrés laboral

El estrés laboral puede dar lugar a comportamientos disfuncionales y poco habituales en el centro de labor, además de contribuir con la descompensación física y mental del individuo.

En casos extremos el estrés prolongado o eventos laborales traumáticos pueden originar problemas psicológicos e incluso psiquiátricos, impidiendo que la persona vuelva a trabajar con la funcionalidad que es debida.

Cuando se está bajo el estrés, es difícil mantener un equilibrio entre la vida laboral y la no profesional que a su vez puede dedicarse a otras actividades perjudiciales para la salud del individuo, como el alcohol, drogas y similares.
O en el peor de los casos, el estrés puede producir la reducción de sus defensas inmunológicas, reduciendo su capacidad para luchas contras infecciones o enfermedades a futuro.

En cuanto su efecto en la entidad, si afecta a un gran número de personas o miembros clave del personal, el estrés laboral puede amenazar el buen funcionamiento y los resultados de la empresa.

Una entidad que no goza de buena salud no puede obtener los peores resultados y desempeño de sus colaboradores, y esto no solo puede afectar los resultados, sino a la supervivencia de la misma entidad en un mediano a largo plazo.

Evaluación y gestión de riesgo del estrés laboral.

Para evaluar los riesgos del estrés laboral, es preciso responder estas preguntas básicas:
¿Cabe la posibilidad de que el estrés laboral este afectando la salud de los trabajadores?
¿Cómo puede resolverse el problema del estrés?
¿Se vigila la totalidad del sistema laboral?

Esta preguntas tiene como finalidad determinar la existencia de prácticas o circunstancias laborales que pueden desequilibrar entre lo que se exige y los recursos que se dispone para llegar a la meta. En el caso del estrés, la importancia de los desequilibrios viene indicada por la relación de estos y los signos del mismo en los distintos empleados.

Una vez identificados los problemas, pueden adoptarse medidas dirigidas a reducir el estrés laboral.

Para lograr una buena gestión de riesgos es necesario lo siguiente:

1.- Analizar la situación del colaborador y posteriormente evaluar el riesgo.
2.- Acto seguido estructura un plan de actuación para reducir el riesgo de estrés laboral y colocarlo en marcha.
3.- Durante el curso del plan de actuación, éste debe ser evaluado.
4.- Finalmente tomar en cuenta las lecciones aprendidas y adopción de nuevas medidas basadas en los resultados de la evaluación.

La gestión de riesgo es una estrategia de solución de problemas relacionados con la salud y seguridad laboral, y constituye un medio de mejora permanente del trabajo de las condiciones de las mismas, y por consiguiente la salud del trabajador y de la entidad.


jueves, 11 de diciembre de 2014

Colocaciones de Cajas Municipales crecen en un 9%

Las Caja Municipales de Ahorro y Crédito (CMAC) incremento un 9% en sus colocaciones al cierre de octubre último, respecto al mismo mes del año anterior, alcanzando un total de S/. 12,636 millones, de los cuales el 93% son colocados en divisa nacional y el resto en divisa extranjera.




Según la data de la Federación Peruana de Cajas Municipales de Ahorro y Crédito (Fepcmac), el 64% de la cartera colocada a octubre del 2014 corresponde a créditos a micro y pequeñas empresas, que es el principal objetivo de las CMAC.

Mientras que el resto de lo colocado corresponde a préstamos de consumo en 19%, corporativos, grandes y medianas empresas suman 12%, e hipotecarios en 6%, del total de cartera.

Las colocaciones en el mercado microfinanciero peruano a octubre fue de S/. 31,150 millones de nuevos soles, de los cuales S/. 12,636 millones corresponden a Cajas Municipales (41%); S/. 10,941 millones a Financieras (35%); S/. 4,182 millones a Mi Banco (13%); S/. 1,617 millones a Cajas Rurales (5%); S/. 1,250 millones a Edpymes (4%); y S/. 524 millones a la Caja Metropolitana (2%).

Las CMAC son instituciones financieras plenamente supervisadas por la Superintendencia de Banca y Seguros y AFP (SBS), al igual que cualquier otra empresa financiera, y además están cubiertas por el Fondo de Seguro de Depósito.

martes, 2 de diciembre de 2014

Desafío y oportunidad: Gestión de Riesgo Microfinanciero

Actualmente el mercado de las Microfinanzas peruano se encuentra en un proceso de transformación, con fusiones y adquisiciones en el sector, razón por la cual se debe afrontar con medidas estratégicas.

La gestión integral de riesgo en las instituciones microfinancieras resulta clave para su sustentabilidad en el largo plazo, incorporar y desarrollar su práctica resulta uno de los más grandes desafíos y oportunidades que enfrenta la industria.



La administración integral de riesgos es una herramienta de gestión gerencial, es una forma sistematizada de mecanismos, procedimientos que cuentan con una estructura metodológica y herramientas específicas que se enfocan en prevenir sucesos que se materialicen en pérdidas o mitigar el impacto de estos eventos en la organización.

En la industria de las microfinanzas existen riesgos principales que podemos dividir en dos categorías: institucionales y externos. Los riesgos institucionales son los que están bajo el control directo de las propias instituciones, como el gobierno institucional, la calidad de la administración, el riesgo crediticio, la gestión de clientes y el riesgo de liquidez. Los riesgos externos son los que están fuera del control de la institución e incluyen, entre otros, las variaciones en los tipos de cambio o las tasas de interés, el sobreendeudamiento de los clientes, la competencia, el riesgo relacionado con la reputación y la interferencia política.

Otros de los problemas que existen en la actualidad es las microfinancieras es que al tener la autorización de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) para expandirse, es decir aperturar nuevas agencias se requiere incorporar recursos humanos, demanda recursos financieros y es allí donde se presentan nuevos riesgos. Por ende surge la competencia y promocionan ofertas, referentes a tasas e intereses, ofreciendo tasas inferiores despertando el interés del cliente a elegir.

Estas situaciones han originado que los créditos sean colocados con una inadecuada evaluación, la capacidad de pago no está cubriendo adecuadamente los créditos. Cada día es superado por las deudas del sistema financiero del cliente, incumpliendo con los pagos y asimismo con la totalidad del crédito, originando mayores provisiones, sobrecostos y poca rentabilidad.

Existen instituciones de microfinanzas que han logrado excelentes resultados en su gestión de riesgos, y hoy han logrado administrar con mayor eficiencia los efectos directos e indirectos de la crisis, la respuesta es sencilla: estaban mejor preparadas. Enfatizando que el éxito alcanzado no solo se debe a sus resultados financieros, sino por la capacidad y alcance de un sistema de gestión de riesgo, que les permite prepararse para los riesgos potenciales futuros.

Crear una cultura organizacional de gestión de riesgo es todo un reto, es uno de los elementos de prevención más significativo e importantes para la efectiva gestión integral de riesgos. Algunos puntos importantes para lograr una efectiva gestión de riesgo son: 
  •          Adecuada estructura organizacional y sanas prácticas de gobierno corporativo.
  •          Promoción permanente de que la responsabilidad de la gestión de riesgo es de todos.
  •        Permanente capacitación y promoción de cultura de gestión de riesgo en las unidades comerciales y en back office, que es donde se realiza la efectiva gestión del riesgo. 
  •          Promoción de instrumentación del Código de Valores y Ética. 
  •          Sistema de Comunicación efectivo en todos los niveles.
  •          Efectivos sistemas de control y procedimientos (auditoría interna y externa).
  •          Implementación de las mejores prácticas de microfinanzas y estándares internacionales relacionados con la gestión de riesgos. 


Mejorar la gestión integral de riesgos es un reto, pero está lleno de beneficios y oportunidades, instituciones más fuertes, mejor preparadas y con mayores posibilidades de fondeo.